Caminar tiene seguidores en todo el mundo y han encontrado que es un camino útil hacia la liberación y la felicidad debido a la naturaleza del ejercicio. Es simple, se puede hacer en cualquier lugar, y la antropología humana sugiere que fue caminar lo que mantuvo a las tribus nómadas en pie, ágiles y activas. Caminar puede mantener el cuerpo en forma, aumentar la fuerza abdominal, fortalecer las rodillas, mejorar la flexibilidad y el equilibrio, mejorar la postura e incluso reducir la presión arterial alta y las enfermedades diabéticas y sus efectos. ¡Caminar es beneficioso para reducir la rigidez y la inflamación y no agrava la mayoría de las afecciones crónicas de la rodilla! Sí, si te preocupa caminar con dolor de rodilla o tienes las rodillas sensibles, ¡sigue leyendo!
Un estudio reciente realizado por investigadores de Baylor College of Medicine y publicado en Arthritis & Rheumatology muestra que caminar puede ayudar a las personas de 50 años o más con osteoartritis de rodilla a aliviar el dolor común. Los resultados del estudio también indican que caminar como actividad física puede ayudar a reducir el desgaste de las articulaciones.
Caminar puede ser beneficioso para las personas con artritis, ya que ayuda a reducir los síntomas de la artritis y mejora la calidad de vida.
Las personas de todas las edades necesitan incorporar el caminar en su vida diaria para evitar ser víctimas del sedentarismo. Los adultos mayores deben confiar en caminar para mejorar la movilidad y el equilibrio y como un ejercicio de baja intensidad.
¿Por qué caminar es bueno para las rodillas?
La articulación de la rodilla está formada por hueso y cartílago. El cartílago no tiene suministro de sangre, por lo que depende del líquido sinovial para nutrirse. Por lo tanto, asegurarse de que sus articulaciones se muevan es una forma de garantizar que el cartílago obtenga los nutrientes que necesita para mantenerse saludable y móvil.
El senderismo tiene muchos beneficios. Como actividad de bajo impacto, evita ejercer una tensión indebida en las rodillas. También puede contribuir al fortalecimiento muscular gradual en esta región.
Lo mejor es comenzar lentamente y hacer sesiones de caminata de media hora al menos de tres a cinco veces por semana. Esto no solo ayuda a desarrollar los músculos de las piernas, sino que incluso conduce a la pérdida de peso para reducir la presión sobre las rodillas sensibles. Una vez que los músculos se fortalecen, actúan como una rodillera natural, manteniendo todo en su lugar.
Por simple que parezca, los adultos mayores pueden tener dificultades incluso para caminar sin ritmo. A medida que envejecemos, nuestros huesos y articulaciones se vuelven vulnerables a dolores y enfermedades crónicas que afectan la movilidad y causan dolor en las articulaciones, y algunos pasos pueden volverse dolorosos y hacer que se sienta tembloroso. En casos severos de artritis, reumatismo y espondilosis, caminar puede volverse imposible. Antes de que se ponga peor, caminar todos los días puede ayudar a mantener estas condiciones a raya por un poco más de tiempo.
Consejos para caminar con dolor de rodilla o con rodillas sensibles
Prestar atención a ciertas cosas y tomar algunas medidas de precaución puede facilitar el día a pesar de las rodillas sensibles. Aquí hay algunas maneras de proteger sus rodillas mientras camina:
1. Trate de dar 5000 pasos al día:
Haz que ese sea tu primer objetivo. Finalmente, si puede exceder esto regularmente sin que el dolor aumente, ¡considérelo una ganancia!
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2. Aumente su tiempo de caminata:
¿Eres un novato en caminar? ¡No te abrumes demasiado! Aumente su tiempo de caminata y acelere lenta y constantemente. Comience a un ritmo cómodo y auméntelo mientras aumenta gradualmente la resistencia. Finalmente, intente caminar a paso ligero oa un ritmo que le resulte desafiante. Si el dolor dura más de dos días, deténgase y consulte a su médico.
3. Elija bandas de rodadura más suaves:
Debe optar por caminar por senderos de superficie natural, lo cual es fácil para las articulaciones. Los pisos de los centros comerciales y las tiendas son en su mayoría de hormigón, por lo que debe elegir un camino de tierra, un estadio/campo o una pasarela segura dentro de su condominio/vecindario.
4. Elige los zapatos adecuados:
Sus zapatos deben ser planos y flexibles si planea caminar con dolor en la rodilla. Asegúrese de que sean flexibles en la parte delantera del pie y que tengan un pequeño espacio entre el talón y la punta. ¡Por supuesto, evite los tacones altos, los dedos puntiagudos y los zapatos pesados! Los zapatos con puntera ancha brindan espacio adicional para la comodidad.
Además, ¿sabías que caminar descalzo sobre el césped tiene sus beneficios?
5. Manténgase en movimiento durante todo el día:
El ejercicio es extremadamente importante para todos, independientemente de su estado de salud. Estirar cada 15-20 minutos también ayuda. Mantiene el líquido sinovial en movimiento. Sentarse demasiado tiempo puede ser dañino, así que levántese y póngase en camino hacia el bien a largo plazo de sus rodillas y su salud.